Para empezar llegamos en horario y la cabaña no estaba limpia. Pudimos entrar dos horas después. Almorzamos en el restaurant del lugar que es caro, te atienden mal y la comida estaba en mal estado.
La cabaña estaba en pésimas condiciones, en especial el baño con la bacha tapada, el botón del inodoro roto, la mampara del baño rota y sucia. La cocina llena de hormigas, un asco. La cocina se salía de lugar. El hogar tiene un pésimo traje y quedas lleno se olor a humo. La limpieza dejaba mucho que desear. Faltaban utensilios de cocina (vasos, tasas, cubiertos...) y el desayuno es un fiasco, no debería considerarse eso un desayuno. Sino snack de de cortesia. Estaba todo tan mal mantenido que se inundó el baño y nos tuvimos que poner a pasar trapos de piso. Fui a avisar en Consejería y me contestaron que no podían hacer nada porque era domingo...paupérrima la atención al cliente. Para colmo carísimo pagamos 14mil pesos por dos noches por la peor cabaña, atención, servicio y limpieza que experimente hasta ahora.