Lo que más nos gusta de ir a Merlo, San Luis, es quedarnos en Las Nubes. Este fue nuestra novena vez en Merlo y en Las Nubes, lugar que descubrimos cuando recién se había establecido. El lugar es soñado, la atención de todo el personal, más que amable, la comida, siempre con sabores diferentes, originales y con el gusto especial de sentirse como en casa.
Las habitaciones son cómodas y limpias, con vistas espectaculares de las sierras , especialmente a la mañana, cuando comienzan a cambiar de color según el sol va subiendo en el cielo y se pueden admirar desde la galería o el balcón de cada habitación durante el desayuno.
El lugar es ideal para descansar y "ponerse a tierra", y la disposición de las habitaciones permite, si uno no quiere, no ver gente ni escuchar ruidos, y poder disfrutar, por ejemplo, de la lectura o simplemente, del paisaje.
Gracias, Ricardo y familia, por siempre hacernos sentir como en casa, cada vez que visitamos Merlo.