Estuve 3 insufribles noches ya que fui en un tour. La habitación(N°6) MEGA CALUROSA!!! OBVIO que sin Aire acondicionado.... al pedir un (miserable?!) Ventilador contestaron con ARROGANCIA, de la peor de las MANERAS que YA ME LO LLEVABAN: cuestión que todavía lo espero!!!!
La comida super escueta... Lo peor, el desayuno: hacían formar interminables filas para otorgar en mano y por cabeza, a cada rehén (húesped, perdón) 1 medialuna y 1 bizcocho de ojaldre. Café?! OLVÍDALO!!! HABÍA 8 TAZAS... PASAJEROS 9 EN ADELANTE: A CANTARLE A GARDEL!!
La mala onda de la moza/recepcionista y cómo revoleaba la comida en la mesa sin decirte ni qué era lo que comías (que por cierto, la ILUMINACIÓN ES INEXISTENTE EN TODA LA PENSIÓN DE MALA MUERTE) ES OTRA HISTORIA....
PARA RECOMENDAR SÓLO A ENEMIGOS!!!!

Está bien ubicada, a 2 cuadras del centro. Comida aceptable. Habitaciones confortables en especial en la zona ampliada, sin embargo está zona se encuentran alejada de recepción y sin techo en el camino a ella, si llueve el pasajero se moja para llegar a recepción o calle. Wifi sólo en recepción y sólo en algunas horas del día.

Al llegar ni toallas ni papel higiénico en la habitación. No hubo explicación satisfactoria de la encargada. Luego la dueña pidió disculpas, mientras no pudimos higienizarnos luego de un viaje de más de doce horas. Desde la habitación que se nos asignó, aparentemente parte de una ampliación del establecimiento alejada y sin abrigo de ninguna galería, debíamos trasladarnos hacia la recepción que estaba en el otro extremo de la hostería para reclamar, debido a que no poseía teléfono. Igualmente él wifi solo se podía tomar en la recepción, de muy mala calidad y permanentemente saturado. Solo para pasar una noche y previo revisar la habitación antes de tomarla. Personal escaso y con poca cordialidad en la atención.