Nos alojamos por 4 noches en una hab doble matrimonial, cómoda, con buen servicio de limpio de limpieza. La atención en front desk es buena, rápida y eficiente. Tiene 3 piletas al aire libre y una cubierta, en muy buen estado y excelente calidad del agua termal dulce. NO cuenta con SPA desde la pandemia, al momento siguen en obras (la página web que dice que SI tiene spa). El desayuno es bueno pero el servicio es deficiente, la atención es personalizada y genera largas colas entorpeciendo el mismo. El restaurante es bueno en calidad y servicios. Sorpresa nos dimos que no tenían chivitos en el menú (!!no Hay chivitos en Santiago-Termas¡¡). La cochera del hotel es muy limitada, los vehículos deben quedar en la calzada, sin resguardo de vigilantes del hotel. En el sector de piletas se cuenta con un servicio de bar y minutas. El servicio de maletas a la habitación, es escaso y deficiente. Covid: con registro de temperatura/ingreso comedor, y sin controles en el uso del barbijo en espacios cerrados. El hotel tiene una excelente ubicación y a la mano de todos los negocios, tiendas entre otros