Hemos visitado termas ya en 4 ocasiones y debo decir que cada vez que vamos nos hacemos de mas y mas gente que lo frecuenta. El hotel cuando llegas no te esperas la experiencia que vivís al quedarte en el. Tal vez sea por la fachada, pero debo admitir que han ido modificando desde que lo conocemos las instalaciones. Hay cosas por mantener que aun deben atender, pero eso no ha hecho jamas de mi estadía una problema. Primera vez que fuimos no estaba el SPA de atrás cruzando la calle, no estaba el restaurante Italiano. Para nosotros ir es estar en familia y al mismo tiempo tener la oportunidad de cada uno disfrutar lo que quiere. Esto se debe a que hay un increíble equipo de animación y para el cuidado de los niños que hace que tu estadía se simplifique y sea super divertida. Los mozos atentos a los detalles en la pileta y en las comidas, con nosotros y con los chicos. Desde que entras te sentis bien recibido y te vas sabiendo que volves. Realmente una escapada que repetimos siempre sin dudarlo.