Fuimos de paso a principios de Febrero. Las instalaciones son acordes a un hotel de este tipo, en cuanto a habitaciones y baño. El desayuno básico. No tiene ningún tipo de actividad para niños. A pesar que teníamos incluído uso de spa, no lo pudimos utilizar (que nos venía bien, para al otro día seguir viaje, hacía el Norte), porque estaba todo reservado (el check in fuè a las 15 hs). Punto aparte el restorant, platos que no corresponden a un hotel de este tipo. Pedimos bife de chorizo, que estaba duro, no se podía masticar (dejamos la mitad), risotto con azafrán para olvidar. Le comentamos a la moza, y nos dijo que ya varios comensales se habían quejado (por su puesto que ella no tiene la culpa, y aparte nos atendió muy bien). Precios de restorant caro, para lo que ofrecen. La piscina hay que pagar aparte, pero también estaba todo reservado. La atención del personal, correcta.