Muy buen hotel, ubicado frente al Nahuel Haupi y al costado del centro civico.
Habitaciones prolijas (falta algo de mantenimiento…), muy buena la atención del personal. Piscina climatizada con vista al lago (un poco chica).
La comida excelente , a precios razonables.
El desayuno bien, hasta ahí. El cafe mediocre.