Fuimos una tarde a tomar el té al hotel Llao Llao.
Se ofrecen dos opciones, a la carta (que fue la que elegimos) y otra de precio fijo.
Se reserva por teléfono sin costo alguno. Al llegar fuimos dirigidos y acomodados en salón. La opción a la carta es ofrecida en un salón secundario sobre un costado del edificio, en cambio la merienda de costo fijo es en un salón principal con mejor vista y ventanales.
Ordenamos café con leche, jugo de naranja y una variedad de mini tortas. La pastelería no es de calidad, deja que desear, no está a la altura de lo que un hotel como este debería ofrecer.
Entre dos gastamos alrededor de $ 80.000 ($ 40.000 cada uno) , la opción de valor fijo es de $ 60.000 por persona.
El hotel Llao Llao es imponente, en un entorno único al pie de las montañas y junto a lagos.