Vinimos a Bariloche en familia y nos hospedamos tres noches en el hotel. La ubicación está genial ya que estás en pleno centro.. (en frente hay un restaurante que se come muy bien)
El personal muy atento.
Las habitaciones espaciosas, las camas cómodas... la vista un espanto!!! Nos tocó un primer piso con vista a una pared..
El desayuno lejos de ser continental pero está bueno... tenés que anotarte en un turno de los tres que hay.. pedimos huevos revueltos pero tiene un costo adicional lo cual no tiene sentido...
La pileta y el gimnasio muy buenos!!!
- Wi-Fi gratis
- Bar/Salón