Hace ocho años nos quedamos en este hotel y regresamos en está ocasión por qué nos había gustado mucho, y vaya que pasaron tantos años, la cabaña que esta vez nos toco estaba en un estado pésimo, la alfombra de la sala estaba llena de manchas y el sofá parecía que tenía mil años, el tostador no funcionaba y tenía dos hornos de microondas, uno de los cuales no funcionaba bien y casi me quemo y para rematar las camas muy incómodas. Es una pena que a un hotel que era tan bonito no le hayan dado mantenimiento. Y peor aún cobren una tarifa de un hotel gran turismo.
556
156
43
26
22