Ni bien llegas al front desk, te recibe una señorita muy malhumorada y con mala atención, en el cual pocas ganas de atender tienen. Después les haces consulta sobre estacionamiento y ni ganas de responder tienen. Nunca brindaron un peor servicio que este hotel. Ya veo porque tiene tantas malas reseñas, si las hubiese leído no vendría jamás. Las toallas Tenes que rogarles que te las cambien y pedir papel higiénico es una odisea. La habitación vino mugrienta, que esperar de este hotel? Nada.
No volveré jamás