Un souvlaki de pollo seco. Croquetas de calabacín insípidas. Las de tomate pasables.
Lentísimos al servir, a pesar de tener cosas sencillitas. Los camareros muy amables. Al final, ouzo y fruta.
¿Es el propietario o administrador de este establecimiento? Solicite su perfil gratis para responder las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.