Restaurante ubicado en un callejoncito, un poco escondido y la apariencia desde afuera no permite imaginar el ambiente que se vive adentro. Muy bonito y bien decorado, hay que reservar pues es muy solicitado,el sitio es animado y el servicio muy bueno.
Comida excelente, amplia oferta de vinos. Pedimos un Martinsancho verdejo 2015, frutal y fresco, entradas Wood-Fire Spanish Octopus, Charcuteria, Papas bravas y platos fuertes Cassoulet Catalan, Grilled Bavette, Pan Seared Salmon, todo muy bien preparado. Sitio super recomendado, para volver !!
¿Es el propietario o administrador de este establecimiento? Solicite su perfil gratis para responder las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.