Recomiendo este apartamento, muy buen precio y muy buen situado. No falta de nada y el personal que nos atendió (Walter) fue muy amable y cordial, poniendose a nuestra disposición para cualquier cosa que nos hiciera falta. Comparados con los apartamentos europeos, tal vez la primera impresión de éste será que nos parece un poco viejo, tal y como eran los pisos en los años 80. Pero enseguida te acostumbras a él. Lo mejor es la cocina, se ve nueva y totalmente equipada con horno, micro, lavavajillas, cafetera, tostadora, nevera y congelador. Tambien hay lavadora y secadora, genial. Las camas normales, ojo, no muy grandes, en comparación con las que tiene los hoteles. Estaba todo muy limpio, un 10 en limpieza. Lo peor los baños, pequeños y bastante viejos y usados, pero no se pueden pedir peras al olmo, ni más por menos. Muy contentos en general, repetiremos si volvemos.