Nos alojamos en el Inn At The Market a mediados de noviembre. La ubicación es perfecta, literalmente sobre el Pike Market, uno de los lugares más característicos de Seattle. Desde las terrazas las vistas son impresionantes. Las habitaciones son amplísimas, pero con una decoración algo antigua. A pesar de que el estado general de las instalaciones es muy bueno y limpio, creo que deberían realizarle un lavado de cara (una reforma a los baños y a la decoración es necesaria para justificar el precio). El personal de recepción y los aparcacoches correctos, pero secos. Las limpiadoras, mucho más amables. En general, la impresión es muy buena. Sólo destacaría como negativas las dificultades con la página web para rescatar la reserva, puesto que tuve que realizar modificaciones en mis fechas. Tuve que escribir varios correos electrónicos al hotel para solventar la situación y tardaron mucho en responderme por problemas técnicos, según me dijeron, aunque finalmente lo resolvieron con profesionalidad.