Hemos encontrado la tranquilidad que buscábamos. Las zonas exteriores del hotel son una preciosidad, la habitación correcta y cómoda y la comida súper rica. Ha sido destacable la atención del personal, especialmente de los camareros tanto del desayuno como de la cena. Muy correctos, amables y serviciales. Hemos ido con una bebé y en todo momento han intentado que estemos cómodos y han sido muy cariñosos con ella.
Estamos deseando volver el verano que viene ☺️