Nada que sobre y nada que falte. Cualquier empleado del hotel se comporta como si el hotel fuera suyo creando una atmósfera óptima para disfrutar de la estancia. El restaurante ofrece productos de primera.
Está en un lugar super tranquilo y tiene un jardín impresionante. Sólo se encuentra a unos 10 kmts de Ortigia, la ciudad vieja de Siracusa, con muchos lugares interesantes para visitar y con una oferta gastronómica buena, variada y asequible.
El hotel, además, dispone de dos piscinas que normalmente no se encuentran en un hotel de sólo 17 habitaciones. Altamente recomendable.