Nos trasladaron aquí ya que cerraban el Santa Cruz que está a 6 km y estaba en obras por el mismo precio. La habitación era perfecta, muy grande para nosotros cuatro. Uno de los tres radiadores de la habitación no funcionaba , pero no era necesario ya que hacía más bien calor. El desayuno y la cena perfectos, variado y suficiente.

El hotel a sufrido un lavado de cara, las habitaciones y zonas comunes estan reformadas. El trato del personal es muy bueno, siempre atentos a cualquier problema. El buffet aun que no incluye bebida en las cenas tiene variedad de platos y cambian cada día.
La localización a pistas es insuperable a 100 m del telecabia de Borregiles y situado al lado de la plaza de Pradollano por lo que tienes todas las tiendas y bares a tu alrededor para hacer vida una vez acabes de esquiar.

Estuvimos pasando nochevieja con otra familia y la verdad este alojamiento es ideal si vas con idea de esquiar, la ubicacion es perfecta y las instalaciones muy correctas, sin lujos. por poner un pero el buffet del hotel no era muy alla, poca variedad y algunas cosas se acababan en seguida y no reponian. Destacaria al Jefe del comedor "Antonio?" y Andrea en recepcion, hacen que todo sea muy facil y agradable durante la estancia. Volveremos pero solo para alojarnos sin ningun tipo de pension.