Hemos disfrutado mucho de la estancia, de comer en la terraza y de todas las instalaciones de la urbanización (padel, piscinas..etc). La casa está muy cuidada y la propietaria, Rosa, siempre atenta por whatsapp para cualquier cosa, le comentamos un incidente que tuvimos con la sandwichera y al día siguiente nos facilitó una nueva. Al ser un adosado y tener la zona tantos espacios ajardinados, esperábamos encontrar insectos en la terraza, y para nada, ni una hormiga ni araña ni nada (por lo menos a principios de verano que ha sido nuestra estancia), comentándolo con Ricardo el propietario cuando nos despedimos nos dijo que contratan una empresa todas las primaveras para fumigar, la verdad se agradece mucho ya que en otras casas que hemos estado anteriormente en Costaballena hemos sufrido este tema.
La urbanización es grande y los peques han disfrutado mucho jugando, tiene muy cómoda la salida de la casa al interior de la urbanización. Está muy bien situada, caminando por la principal avenida en cinco minutos estás en la playa, y en la misma avenida hay un gran mercadona, farmacia, heladería y algunos restaurantes y pizzerías.
Hemos disfrutado mucho nuestra estancia. Esperamos repetir!

La casa está muy bien situada, como a 5-10 minutos de la playa y muy cerca también del Mercadona y de los restaurantes. La urbanización está fenomenal: tiene dos pistas de padel, columpios para los niños y piscina para adultos y niños que está muy bien. La playa es muy ancha y larga y es estupenda, mis hijas disfrutaron un montón del agua porque no estaba nada fría. Costa Ballena es una zona muy tranquila, al menos en junio, cuando fuimos nosotros, y tienes más o menos de todo cerca: supermercado, restaurantes, no una gran variedad, pero hay alguno, tienda para alquilar bicicletas..., además está muy bien situada para desplazarte a los pueblos de los alrededores, Rota, Chipiona, Sanlúcar, El Puerto de Santamaría...

La casa está fenomenal, disfrutamos un montón de la terraza comiendo y cenando en ella y la cocina y las habitaciones están bien, el colchón de matrimonio, y supongo que los otros también, es muy bueno. Por poner algún pero, el olor en el baño de arriba, a lo mejor que se echa de menos alguna toalla más, el tener que llevar las sábanas y las sartenes y otros utensilios de cocina que están algo usados pero que todavía se pueden utilizar.

Rosa, la propietaria, siempre dispuesta a facilitar la estancia y respondiendo rápido a cualquier mensaje nuestro.

Lo pasamos fenomenal, la zona y la playa son muy bonitas, y la verdad es que no nos importaría para nada repetir vacaciones en la casa de Rosa.