Las instalaciones del hotel están bien, se ve que es un hotel nuevo, al llegar te reciben de manera cordial, te llevan hasta tu habitación después de hacer el check in, pero te advierten de las reglas que hay que seguir, una de ellas es no hacer ruido para no molestar a los demás huéspedes y otra muy puntual es que no debes manchar de nada toallas y sabanas, a primera vista todo se veía limpio en la habitación, pero sorpresa después de haber dormido en la cama nos dimos cuenta que al voltear la almohada estaba toda llena de sangreee, algo super asqueroso que de habernos percatado de esa situación, no hubiéramos dormido ahi, los huéspedes de la habitación vecina estaban haciendo demasiado ruido y no hubo nadie que les llamara la atención, en general no lo recomiendo aparte de que no queda cerca del centro.