Lo ideal es hacer un recorrido acuático por la reserva y otro terrestre, para tener un panorama más completo de una región de impresionante naturaleza.
Al navegar adentrándose en la ría encontramos islotes con lobos marinos, acantilados repletos de cormoranes, toninas overas nadando a pocos metros, e innumerables gaviotas, ostreros, biguás, pingüinos, etc. En la Isla de los Pájaros se puede bajar a la playa y visitar una colonia de pingüinos de Magallanes.
El recorrido terrestre comienza en un camino costero de ripio en buenas condiciones, no es necesario transitarlo con vehículos especiales. Se suceden varios cañadones, uno más lindo que el otro: Cañadón del Indio, del Paraguayo, del Puerto... Las vistas de la ría son espectaculares, el ancho de la misma va variando, al igual que la altura costera de observación. Se aprecian acantilados, cuevas naturales, islas, islotes, y pequeñas playas de arena, algunas de fácil acceso.
En síntesis una reserva natural maravillosa e imperdible.