Cuando era niño, pasaba los fines de semana acompañando a mi padre en su búsqueda de comida vietnamita que supiera tan bien como lo sabía en Nha-Trang. Mi Mi se ganó su aprobación, y rápidamente nos convertimos en clientes habituales. Desde cálidos bol de pho hasta refrescantes batidos de mango, este negocio familiar sin florituras no escatima en calidad. No dejes de pedir los crujientes rollos de primavera, ¡son los mejores!

Creado por el propietario de restaurantes canadiense Jenn Agg, Le Swan es un romántico destino nocturno de cita, con acogedoras cabinas rojas, iluminación tenue y motivos de cisnes. Dejando de lado el ambiente, la comida se lleva el espectáculo. En invierno, me encanta calentarme con la sopa francesa de cebolla y el bife Bourguignon, y luego terminar la noche con el encantador banano de acogida. Le Swan es una aventura de amor al primer bocado.

Después de un viaje a Grecia, puedo confirmar que Messini de Toronto compite con los restaurantes de Atenas. Su plato de pita de USD 19 está lleno de tomates jugosos, tzatziki picante, papas fritas crujientes y una selección de proteínas (adoro el cerdo). Además, incluye platos abundantes como ensaladas, papas y arroz. Para el postre, pasa por Atenas y prueba los pasteles de loukoumades: masa bañada en miel, cubierta con una salpicadura de canela.

La atención a los detalles es lo más importante en este lugar de omakase. Desde vajilla creada por ceramistas japoneses hasta la extensa selección de sake, el chef Takeshi Sato y su equipo no se pierden de nada. ¿Cuál es la razón principal para conseguir un asiento? Además de su estrella Michelin, Kappo Sato incorpora una variedad de métodos de cocina, como asar y asar para elevar los platos, lo que lo aleja del enfoque en el pescado crudo que se suele ofrecer en otros omakases.

Ubicada en una casa victoriana en el distrito de entretenimiento de King West, Sara es una fusión de cocina torontoniana y asiática. Recomiendo comenzar con las latkes de ikura adornadas con huevas de salmón, seguidas de un bife impecablemente cocido con miso bearnesa y salsa de jus de whisky. ¿Lo inesperado se destaca? Mi compañero vegetariano probó la ensalada picada con queso cashew, lo que nos dejó a ambos sorprendentemente satisfechos.

¿Tienes ganas de unos carbohidratos? Sugo es popular por sus recetas ítaloestadounidenses (¿o debería decir canadienses?). Enormes platos de pasta, crocantes palitos de mozzarella y un esponjoso tiramisú son los puntos destacados. Y sí, puedes pedir los tres sin preocuparte por tu billetera. Nota: Solo es para entrar, y los asientos generalmente toman una hora. Mientras esperas, explora las tiendas vintage de Bloor (¡Lucky Tiger Vintage es genial!) o tómate una pinta en Burdock Brewery.

La comida callejera mexicana llega al moderno mercado Kensington en Birria Catrina. Mi comida favorita es el combo n.º 1: tacos crujientes y quesadillas cursis con una guarnición de caldo de birria, lima y salsa. Es mi lugar preferido para almorzar, y gracias a sus porciones generosas, a menudo tengo sobras para cenar. A pesar de la multitud, el servicio es sorprendentemente rápido, pero el consejo profesional: pide con anticipación. Estos auténticos tacos mexicanos son una visita imperdible.