Si hablamos de historia, arte y arquitectura, Barcelona lo tiene todo. Está la icónica Basílica de la Sagrada Familia de Gaudí, el Museo Picasso y el Barrio Gótico. Pero mira más allá de los sitios históricos y los ajetreados mercados y notarás cómo la naturaleza ofrece el mejor espectáculo: la ciudad está literalmente rodeada de ella. Por un lado, tienes casi 5 km de hermosas playas arenosas que les compiten sin problemas a las islas Baleares vecinas, y por el otro, las montañas Serra de Collserola, que albergan el Parc de Collserola, uno de los parques urbanos más grandes del mundo. Probablemente sea por eso que la cultura de la bicicleta es importante aquí: casi 300 km de ciclovías hacen que sea fácil trasladarse por la capital catalana. Pasa una tarde relajada recorriendo la renovada Rambla (tendrás que caminar junto a la bicicleta cuando llegues a la calle peatonal) y detente para saborear unas tapas con sangría. Realmente puedes hacerlo todo, y a continuación te ofrecemos más ideas.